jueves, 1 de octubre de 2009

a ce le rar




Uno de mis mayores defectos (además de ser impulsiva, repetir 10 veces el mismo chiste, comer demás,autoboicotearme constantemente y algunos más) es no pensar antes de actuar.
Quería escribir sobre la importancia de empezar de cero.
Un amigo mío que se compró una moto, dice que lo mejor de todo es “acelerar y dejar todo atrás“, y cada tanto pienso en que estaría bueno poder hacer eso.
Quizás él haya sido un buen consejero - pero eso ahora no me importa.
Es como cuando estás mezclando témperas para un dibujo y el celeste te queda muy oscuro entonces le ponés más blanco y después te parece que está muy clarito y le ponés más azul, y después lo querés más lila y le ponés un poco de rojo, pero te queda muy violeta, entonces agregás más blanco hasta que es todo un quilombo y ya ni te acordás para qué querías usar celeste en primer lugar.
En esos casos, es mejor dar un paso al costado y arrancar desde el principio. Una casa nueva, un barrio nuevo, amigos nuevos y una nueva forma de ver la vida es lo que necesito ahora, aunque no haya tenido tiempo de pensar en cómo voy a arreglármelas para hacer todo lo que quiero.
Así que estos días aprovecho para ir poniendo todo en cajitas y fantasear con sillones rosa, un balcón que dé a algún lugar lindo y un lavadero para poner el lavarropas y guardar las escobas. Sé que no es lo mismo que subirme a la moto y recorrer Sudamérica, pero algo es algo.

No hay comentarios: